sábado, 24 de mayo de 2014

Écfrasis de un cuadro

El puente Ōhashi en Atake bajo una lluvia repentina (Utagawa Hiroshige, 1857)


En esta xilografía del autor japonés Utagawa Hiroshige podemos apreciar a primera vista un puente de madera de color canela en el que hay gente, un ancho río de color turquesa en el que hay una piragua y la densa lluvia procedente de unas negras nubes.
En primer plano se encuentra un puente de madera que da la sensación de estar un poco en pendiente y cuya base también de madera da una sensación de estabilidad y altura.
Respecto a la gente situada sobre el puente parece que la abundante lluvia les ha pillado de imprevisto y corren a buscar refugio. Transmiten indirectamente que la temperatura del ambiente es más bien calurosa debido a que los cuatro hombres no llevan ropa en la parte inferior y van descalzos y las mujeres, con una tez más blanca, solamente llevan una falda y unos zuecos negros.
En segundo plano vemos una larga piragua de madera cuyo tripulante se esfuerza por moverla para llegar a un lugar más seguro.
El ancho río da una impresión de inmensidad como si fuera un mar respecto al minúsculo tripulante y su canoa.
La lluvia pintada de color negro es torrencial, muy densa, proveniente de unas nubes negruzcas y estables que transmiten aprensión y temor, como si fueran inagotables.
En el fondo se aprecia difícilmente varios árboles, una torre, algún edificio y unos salientes rocosos todo ello difuso y de color negro por la distancia y la lluvia.
La impresión general que transmite el cuadro es de un dinamismo continuo provocado por la lluvia que es protagonista de todo el cuadro, la desencadenante de todas las acciones y que une los tres planos en los que se divide el cuadro.

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